BENEFICIOS
El brócoli es la hortaliza de mayor valor nutricional por unidad de peso comestible.
Preventivo del Cáncer
El brócoli está considerado como una de las hortalizas con efecto protector frente a diversos tipos de cáncer.
Depurativo y Saciante
El brócoli es una fuente muy importante de fibra, recomendada en dietas hipocalóricas
Fortalece nuestras defensas
El brócoli es la hortaliza con mayor aporte nutricional por unidad de peso comestible.
Antioxidante
El brócoli tiene una gran importancia desde el punto de vista nutricional, ya que contiene una elevada cantidad de vitaminas.
Al compralo
El brócoli debe tener un color verde intenso. Si lo va a comprar fresco, tenga en cuenta que cuando empieza a amarillear indica que ha perdido vitaminas y minerales. En el caso de brócoli congelado, trasládelo en bolsas isotérmicas para conservar la cadena de frío desde el origen hasta su hogar y mantener así todas sus propiedades.
Para Conservarlo
El brócoli fresco debe guardarse en frigorífico, preferiblemente en bolsas de plástico grandes o perforadas, si no está protegido por un film.
Como la mayoría de verduras, el brócoli fresco no debe lavarse antes de meterlo en la nevera, ya que el exceso de humedad favorece la aparición de moho. Es aconsejable consumirlo en 3 o 5 días después de adquirirlo y en caso contrario, congelarlo.
Siga las instrucciones que le indica el fabricante de bolsas de brócoli congelado para su conservación y consúmalo antes de la fecha indicada según la potencia de su congelador.
¿Cómo lavarlo?
Se recomienda lavar el brócoli entero antes de consumirlo en agua fría. O bien puede ponerse bajo el grifo de agua y lavarlo durante dos minutos. O bien sumergirlo en un bol con agua que le cubra totalmente. En cualquier caso es recomendable no mantenerlo en agua demasiado tiempo, son 2-3 minutos es suficiente.
¿Cómo prepararlo?
Es importante saber que el brócoli se puede preparar de muchísimas formas, ya que es un alimento muy versátil
Hay que tener en cuenta que un brócoli está compuesto por distintos floretes (los pequeños «arbustos» que lo componen) y el tallo, se recomienda separarlos ya que el tiempo de cocción es distinto.
Comenzamos:
Hervido: corte la pieza separando cada uno de los floretes del tronco del brócoli. Metalos en agua hirviendo entre 3 y 5 minutos, no más, de esta forma conseguirá que queden «al dente».
Al horno: corte en tiras al gusto, recomendamos no muy finas, el brócoli, poner en una bandeja apta para horno y un chorro de aove y sal. Precalentar el horno a 220º 10 minutos antes de meterlo y dejarlo 20 minutos a una temperatura media.
En el microondas: cortar los floretes y el tallo en láminas, con un chorro de aove y sal al gusto, cocer a máxima potencia durante 5 minutos.
Crudo en ensaladas: cortar al gusto y salpimentar, y listo! Está delicioso y mantiene todos sus nutrientes.
Frito: en sartén cortado a láminas al gusto y con aceite, ¡ listo en 5 minutos!
Para cremas, purés, sopas… es una verdura que puede cocinarse de infinitas formas, consulta las recetas que te proponemos en el apartado +Recetas.
CONSEJOS
Te damos algunos consejos importantes que te ayudarán en tu día a día con el brócoli.
100 gr
Al día
El consumo de una ración (100 gramos) de brócoli al día proporciona la cantidad de potasio que el cuerpo necesita para ayudar a prevenir la hipertensión (tensión arterial alta), el infarto cerebral y otras enfermedades de tipo cardiovascular.
100 mg
De vitamina K1
Una porción (100 gramos) de brócoli proporciona a nuestro organismo 100 microgramos de filoquinona (vitamina K1), principal fuente natural de vitamina K. Lo cual excede las necesidades diarias de vitamina K de un adulto sano.
60 mg
De Vitamina C
Gracias a la cantidad de vitamina C que contiene, el brócoli ayuda a estimular la producción de colágeno, una proteína que conforma músculos, tendones y piel. Puesto que el brócoli contiene también otros antioxidantes, su consumo frecuente permite tener una piel sana y flexible.
57 mg
De Ácido Fólico
El brócoli ayuda a prevenir accidentes cardiovasculares gracias a que contiene ácido fólico, zinc, hierro, calcio, vitamina k y el sulforafano, que protege a las arterias de los bloqueos que pueden causar ataques cardíacos.